Aluminio anodizado ¿en qué nos beneficia?

El aluminio es un material en auge en el sector de la construcción que ha ganado enteros con el proceso de anodización. El mismo material se recubre de una capa de óxido de forma natural para protegerse de agentes externos. El anonizado, básicamente, crea una capa artificial de óxido de mayor espesor obteniendo un producto con mayor protección frente al desgaste mecánico y la corrosión.

El proceso de oxidación mediante la electrólisis convierte a la capa en integrada del aluminio, no en una aplicada.

La anodización es un recurso utilizado, aparte de la protección que da ante la corrosión y la abrasión, para darle color a la pieza de aluminio anodizada. La capa integrada recibe el nombre de alúmina y según su grosor tendrá mayor o menor resistencia a los agentes atmosféricos. Su principal beneficio, además de los ya comentados, es su bajo coste de mantenimiento, factor importante tanto para empresas como para usuarios.

Dónde utilizar el aluminio anodizado

El aluminio anodizado está siendo gran protagonista de muchos de los proyectos arquitectónicos del sector gracias a su versatilidad. La gran variedad de aplicaciones hacen de este material un recurso comúnmente utilizado. Este tipo de aluminio procesado lo encontramos en ventanas o sistemas de techos con los que conectar el exterior con el interior.

Como dato curioso, también es utilizado en electrodomésticos y en la industria náutica, aeronáutica y aeroespacial.

Como bien hemos dicho, es un material con un mantenimiento bajo. La forma de limpiar el aluminio anodizado en interiores es con agua enjabonada o con productos sintéticos neutros para cerramientos exteriores.

Por otro lado, en lo referente al color, es posible por medio de dos procesos: la pintura en polvo y la pintura líquida. La primera de ellas se fija en forma de polvo seco y con calor para que forme una especie de piel consiguiendo una gama de colores y brillos extensa. En cambio, la pintura líquida es más usual en productos laminados en forma de sándwich (lámina, polímero, lámina) normalmente utilizados en cubiertas, fachadas o identidad corporativa por su resistencia y flexibilidad.

Así que, no dudes en pedir la ficha técnica del material necesario y cerciorarte de que el aluminio ha pasado el proceso de anodizado. Tu proyecto y el usuario lo agradecerá al tener un producto duradero y visualmente estético. Si estás interesado contacta con nosotros en el  teléfono 922 638 000 o al email:dressler@dressleraluminio.com.

 

 

 

 

 

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